Cuando no masticamos lo suficiente, el bolo alimenticio no está bien lubricado ni descompuesto, por lo que se produce una sensación de pesadez, generando además gases y obstrucción en el sistema de eliminación. Los órganos por los que va pasando el alimento tienen que trabajar mucho más, desperdiciando gran cantidad de energía vital.

La mucina, también presente en la saliva, transforma los alimentos en mucosa ayudando a los órganos digestivos a metabolizarlos. Cuando no segregamos suficiente cantidad, estamos favoreciendo el mal funcionamiento de esos órganos.

1. Mastica bien. Cuando no masticas bien, estás desperdiciando enzimas y forzando a que determinados órganos trabajen más de la cuenta. Cuando no se trituran bien los alimentos, el organismo no es capaz de separar las sustancias benéficas de las tóxicas, fomentando la desnutrición y la intoxicación del cuerpo. Además si masticas correctamente, oxigenas tu organismo produciendo una sensación de bienestar y reduciendo los niveles de estrés.

2. Sirve porciones pequeñas. Comer en un plato más pequeño engaña a tu cerebro y evitas comer de más. Cada vez que comemos, el cuerpo quema energía al procesar los alimentos, por lo que comer pequeñas comidas por 5 veces al día, mantendrá tu metabolismo elevado, lo que dará un impulso de energía y esto a su vez te permitirá quemar más calorías. Además, cuando sabes que tu próxima comida está a un par de horas puede ayudarte a controlar los antojos.

3. Nunca comas hasta sentirte lleno. Aprende a escuchar a tu cuerpo. Muchas veces se abusa de las comidas porque el cerebro no tiene tiempo de darse cuenta que es suficiente. Estas señales no viajan a la velocidad de la luz y si comes muy rápido, sin siquiera masticar, la señal llegará al cerebro cuando ya fue un exceso. Deja de comer cuando estés satisfecho, no lleno.

4. Intenta no tomar líquidos hasta 1 hora después de la comida ya que entorpece la digestión. Esto aplica sobre todo si es agua fría y en gran cantidad de agua, ya que tu cuerpo necesita más energía para regular la temperatura e igualarla a la del cuerpo humano. El proceso de digestión se realiza en el estómago con los jugos gástricos, si tomas mucha agua se disuelve con los jugos y el proceso tardará más tiempo porque necesitas producir más ácido.

5. Hidrátate. Los adultos necesitamos beber por lo menos 1.5 litros de agua al día, pero en época de calor o si realizamos mucho deporte necesitamos más cantidad. El agua es la principal fuente de líquidos. Otras opciones son jugos, té, café, leche, etc.