Además de los alimentos que consumimos todos los días, hay situaciones que pueden subir o bajar nuestros niveles de glucosa. Conoce los más comunes y el efecto que producen.

  1. Comer alimentos ricos en carbohidratos. Estos son de lenta absorción y actúan más como energía de reserva. Algunos son las hortalizas y los frijoles, garbanzos y habas.
  2. Realizar actividad física. El ejercicio es benéfico. pero llevarlo a un extremo y excederte en la actividad y no comer nada antes y durante tu rutina podría influir en que tu glucosa baje drásticamente provocándote una hipoglucemia. Recuerda checar tu glucosa, antes, durante y después del ejercicio en caso de ser necesario.
  3. El estrés. La vida acelerada de la ciudad, la carga excesiva de trabajo o las presiones por la falta de dinero, podrían provocar que te estreses y esto provocar que tu glucosa sufra alteraciones. Debes tratar de buscar actividades que calmen tus nervios. El Yoga o alguna terapia de relajación serán de gran ayuda.

Enfermarse. Contraer un resfriado o una infección estomacal suelen ser más susceptibles a que tu glucosa se eleve. Sigue al pie de la letra el tratamiento que tu médico te señale para que esto no suceda ya que tus defensas son las que están en juego.