Se estima que el 99% de las personas que tienen intolerancia por el gluten o la enfermedad celiaca nunca son diagnosticadas.
Si tienes alguno de los siguientes síntomas puede ser señal de que tengas intolerancia al gluten:
- Queratosis pilar, también conocida como piel de gallina en la parte trasera del brazo. Esto tiende a ser el resultado de una deficiencia de ácido graso y deficiencia de vitamina A secundaria a la grasa de mala absorción provocada por el gluten que daña al intestino.
- Problemas digestivos como gases, distensión abdominal, diarrea e incluso estreñimiento. El estreñimiento es más común en niños después de comer gluten.
- Fatiga, confusión mental o sensación de cansancio después de consumir alimentos con gluten.
- Diagnóstico de enfermedad autoinmune, como la tiroiditis de Hashimoto, artritis reumatoide, colitis ulcerosa, lupus, psoriasis, esclerodermia o esclerosis múltiple.
- Síntomas neurológicos como mareos o sensación de estar fuera de equilibrio.
- Desequilibrios hormonales, como síndrome premenstrual, síndrome de ovario poliquístico o infertilidad inexplicada.
- Migrañas o dolores de cabeza intensos.
- El diagnóstico de la fatiga crónica o fibromialgia.
- Inflamación, hinchazón o dolor en articulaciones, como en dedos, rodillas o cadera.
- Problemas anímicos como ansiedad, depresión, cambios de humor y síndrome de déficit de atención.
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