La tos del fumador, es con frecuencia ignorada hasta que comienzan a presentarse flemas y con la obstrucción en los bronquios, aparece la sensación de ahogo.

La EPOC (Enfermedad pulmonar obstructiva crónica) se caracteriza por la facilidad en el ingreso de oxígeno a los pulmones y su dificultad para salir. En los últimos años, ha pasado de ser la quinta enfermedad más mortal en el mundo a ocupar la tercera posición. Este incremento se atribuye al aumento de mujeres fumadoras, quienes tienen una mayor carga genética para el desarrollo de esta enfermedad y al inicio prematuro del tabaquismo en jóvenes.

Lo primero en cuanto se diagnostica la EPOC, es abandonar el cigarro. El daño ya hecho es irrecuperable, pero para disminuir el riesgo de complicaciones, el paciente tendrá que hacer uso de broncodilatadores y practicar ejercicio físico. “En pocas enfermedades el ejercicio tiene tanto impacto como en la EPOC. Cuanto más activo esté el paciente, menos fatiga sufrirá, por lo que te recomendamos caminar una hora todos los días o hacer bicicleta estática.

Aunque más de un 80% de los casos es ocasionado por el tabaco, hay otros dos factores que pueden provocar la enfermedad:

  • el déficit de alfa-1 antitripsina, una condición genética que se caracteriza por unos niveles en la sangre muy bajos o inexistentes de esta proteína, o
  • por la inhalación crónica de sustancias dañinas para el pulmón como la leña o el carbón en combustión.